Zenith El Primero: el cronógrafo inigualable

Desde su nacimiento en el año 1969 se ha ido configurando como uno de los relojes preferidos entre los más entendidos del sector de la alta relojería.

Durante los siguientes apartados nos aproximaremos a la historia y evolución de Zenith El Primero para entender por qué es todo un símbolo de calidad y artesanía.

Zenith El Primero: el nacimiento de una leyenda

Durante la década de 1960 la manufactura de Zenith ya estaba establecida y gozaba de gran reputación. Hasta ese momento la compañía ya había fabricado movimientos automáticos de alta calidad de 3 manecillas desde los años 40.

No fue hasta el año 1962 cuando los ingenieros de Zenith comenzaron a desarrollar el primer cronógrafo automático del mundo con objetivo de sacarlo al mercado en 1965, año del centenario de la marca. Este movimiento contaba con unas características que no existían en el mercado en ese momento.

Si bien el objetivo no se realizó el día esperado, si se hizo realidad siete años más tarde, en el año 1969. El 10 de enero de ese mismo año, durante una rueda de prensa celebrada en Le Locle (Suiza), Zenith presentó el nacimiento de esta pieza e inmediatamente se convirtió en la primera manufactura en lanzar públicamente un cronógrafo automático.

Las especificaciones que se esperaban del movimiento de cronógrafo automático eran muy ambiciosas: debía estar completamente integrado en el movimiento, accionarse mediante una rueda de columna y tenía que ser al mismo tiempo el reloj de pulsera de cronógrafo más preciso del mundo, capaz de medir el tiempo con una precisión de 1/10 de segundo. Por si fuera poco, todo esto debía incorporarse en un calibre lo más fino posible y con espacio para una ventana de fecha.

Zenith El Primero: primer cronógrafo de cuerda automática

Cuando en 1962, Zenith comenzó a gestar la idea de lanzar un cronógrafo automático, nadie había traspasado ese umbral. El calibre pasó a denominarse 3019 PHC, más conocido como “El Primero”.

Su innovación no solo estaba reducida a un calibre integrado con función de cronógrafo y remonte automático, sino que además su órgano regulador latía a unas 36.000 alternancias por hora, equivalentes a una frecuencia de oscilación de 5 Hz, capaz de medir hasta las décimas de segundo.

Este diseño revolucionario permitió una mayor precisión y eficiencia en la creación y regulación de los relojes, posibilitando una producción de relojes con precisión sin precedentes.

Zenith El Primero: precisión y calidad inigualables

El movimiento de Zenith El Primero, como decíamos, es conocido por su inigualable precisión y exactitud en el cronometraje y por ser uno de los relojes más icónicos que utilizan este movimiento nacido en Suiza.

El Primero se convirtió rápidamente en un icono debido a su revolucionario diseño y eficacia. Zenith the First está fabricado con materiales de la más alta calidad y con una minuciosa atención a cada detalle. Con cada modelo, Zenith se esfuerza por brindar una elegancia y un estilo que atraiga tanto a los coleccionistas como a los aficionados a los relojes de lujo.

Asimismo, el movimiento presentaba un mecanismo de autorregulación llamado "compensación de temperatura" que permitía que el reloj mantuviera su precisión incluso en las temperaturas más extremas. Esta característica particular fue otro gran avance en la historia de la marca, lo que les otorgó otro factor de confiabilidad sin precedentes. Desde entonces, Zenith ha continuado innovando e introduciendo otras características y gamas de complicaciones como la protección antichoque o el indicador de reserva de marcha.

Zenith El Primero: modelos disponibles

Actualmente podemos encontrar varios modelos disponibles de Zenith El Primero. En sus inicios, Zenith presentó su nuevo movimiento El Primero en tres modelos diferentes: el A384, el A385 y el A386.

El primer modelo presentado al público tenía A384 como número de referencia. Esta pieza ofrecía una caja de acero inoxidable de 37 mm con forma de tonel, una esfera plateada con subesferas negras y una escala taquimétrica.

La versión más conocida de la colección es la pieza con número de referencia A386. Este modelo introdujo la esfera que conocemos hoy en día caracterizada con tres registros superpuestos en azul, gris claro y antracita y viste una caja redonda más tradicional con un bisel más fino. Asimismo, junto a la escala taquimétrica, contaba con un anillo en la esfera que dividía un minuto en 100 unidades, así como una ventana para la fecha entre las 4 y las 5 en punto. 

En cuanto a los materiales encontramos una diversidad desde el titanio hasta el acero y oro. Por último, las complicaciones del movimiento van desde cronógrafos y fases lunares hasta calendarios anuales. Con esta amplia gama de variantes, los coleccionistas tienen un sinfín de opciones para elegir cuando exploren el mundo de los relojes Zenith El Primero.

Zenith El Primero: una gran elección asegurada

En esencia Zenith El Primero se erige como símbolo de calidad, artesanía y tradición histórica. Su evolución ha seguido un proceso ininterrumpido desde el año 1969 hasta la actualidad y sigue siendo un elegido por los entusiastas de relojes.

Su diseño minuciosamente elaborado al detalle y su atemporalidad son solo dos de las muchas razones por las que la popularidad de este modelo va in crescendo. Tanto para coleccionistas veteranos como para aficionados, Zenith El Primero es una gran elección.

Los relojes Zenith El Primero se han ido adaptando continuamente a las diferentes necesidades que han ido presentando a lo largo del tiempo. Gracias a sus años de legado y a sus impresionantes innovaciones tanto técnicas como estéticas, Zenith El Primero se ha convertido en todo un clásico atemporal.

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